Hace tiempo que no hago una entrada en mi blog sobre un producto de papelería clásico, para lo que nació este blog, un simple moja dedos, esponjero, mojasellos, humecedor de dedos de toda la vida. Vivió junto a los dediles, otro producto digno de un artículo en Megustalapapeleria, vivieron un renacimiento en la crisis del Covid. Durante los primeros meses de la pandemia donde chuparnos un dedo era peligro de muerte… fueron una buena alternativa a los que pasamos hojas, contamos billetes, cogemos bolsas de plástico, e informada de usos para los que usamos la huella dactilar a modo de prímate y debe estar lubricada!!!
Bueno después de esta introducción me diréis porque he elegido este artículo pues muy sencillo todo empezó cuando pasaba unos días de vacaciones en Gijón y pase a un supermercado y me fije que la cajera decía a los que iban delante de mi “quieren bolsa” y como de un tick fuera mojaba sus dedos en lo que me parecía un mojasellos clásico. Cuando me toco no me quedo más remedio que pedirle permiso para hacer una foto a la esponjilla increíblemente gastada. Pongo la foto para que disfrutéis de un producto bien usado.

Después de hablar con la cajera que me dio permiso, me dijo además que dijera el nombre del supermercado, para ver si le ponían uno nuevo que llevaba tiempo reclamando y no le ponían. Para ella era imposible separar las bolsas sin su esponjero gastado. Este uso no lo había visto muchas veces pero me pareció una buena entrada para el blog.
Recuerdo a cajeros de los bancos que siempre tenían uno y mojaban sus dedos antes de empezar a contar. También en las oficinas cuando había sellos de correos de los que había que chupar “engomados” que mojabas para pegar. Uf! Me hago viejo y me parezco a esos papeleros que escuchaba atónito batallas de antaño. Recuerdo también esos comercios que te envolvían la barra de pan o lo que compraras en un papel de manila marrón y para separar esas hojas finas marrones lo hacían también mojando los dedos en su esponjilla mojadedos.
Muchos de los que aquí me leen no habrán conocido sobres engomados que usaban este sistema de mojar con lengua y en su defecto esponjero para poder cerrar el sobre! Ahora el autodex a hecho desaparecer esto y el email ha dejado casi a un lado el sobre de correos a un lado.
No es un producto que vendamos demasiado, menos esos meses de abril mayo junio del 2020 que desaparecieron de nuestros almacenes y subieron de precio exageradamente. Un momento puntual que ha pasado a venderse 6 o 7 al año. Pienso cuantos virus se deben desarrollar en ese moja dedos del supermercado en ese hábitat húmedo y si además es compartido entre compañeros. Seguro que algún estudiante de biología le puede dar para una tesis doctoral analizar esa reserva natural. Más higiénico que mojarte el dedo con saliva y dejarles tu adn impreso en la bolsa de plástico.
Un producto ideal para humedecer los dedos para contar, separara papeles, billetes, plásticos con las yemas de los dedos. Ideal para mojar sobres engomados, sellos de correos de los de antaño, o estampillas entre otros. Esponja para contar billetes.

A la gente le gusta este esponjero clásico de goma verde por fuera y la esponja naranja también un poco de goma… la goma es dura no se aplasta con facilidad, solo humedece el dedo. El esponjero de la marca LAUFER es una marca de toda la vida que todavia vendemos en LA PAPELERIA MULTIPAPEL. Eso le hace que sea un producto que dure mucho si lo usas bien. Me hace pensar cuantos años tendrá el de la cajera de Gijón. Existe una versión china que a la gente no le gusta que es de espumilla gomaespuma, mucho más endeble que este clásico. Esta versión china de gomaespuma si se hunde con facilidad, y se puede romper rápido. Como veis siempre tiro para lo clásico seguro que esta de gomaespuma moja mejor ya que es más parecido a una esponja.


Existe también una versión todavía más moderna, aunque no tengo la experiencia de usarla si la he vendido alguna vez en mi papelería de Illescas, que es una cera no grasa para que no manche el papel donde te puedes mojar el dedo y usarla igual que el agua. Pero para aquellos que tienen agrietadas las manos o sensibles creo que es una solución mucho más higiénica y que no estropea tu piel. Es una cera antibacteriana, que facilita el agarre de los dedos para pasar hojas o contar papeles individualmente sin esfuerzo.

Me encantaría que me mandarais como hacéis en otras ocasiones otros términos y usos de este producto papeleo creo en peligro de extinción. Que os fijéis si sois de los que en algún momento os mojáis el dedo con la lengua para contar o separar algo, en ese momento os acordéis de esta artículo y me escribáis para contármelo.
No os preocupéis por la cajera que en Gijón hay buenas papelerías donde encontrar un esponjero sin dificultad a día de hoy.