…. y papeletas, no se si son los únicos contentos con la repetición de elecciones generales… el maltrecho negocio de los sobres últimamente tiene un poco de alegría gracias a nuestros mediocres políticos.

Aunque un negocio programado cada cuatro años, era algo rentable y goloso, …con el papel sepia comprado de antemano para los sobres del senado, se ha convertido en un sin vivir. Cuando te descuidas… zasca otras elecciones.

Hace unos años compartía mantel con unos expertos en sobres que me contaban los entresijos de las campañas y la venta de sobres.

Tompla y Unipapel se repartía el mayor pastel, como las agencias de reparto de publicidad unas vinculadas a la izquierda y otras a la derecha hacían un reparto vertiginoso de los envíos electorales de las papeletas con los candidatos, pagados por todos los españolitos de a pie.

Además los sobres colocados en las juntas electorales según el reparto proporcional…. millones de sobres…

Un negocio para grandes jugadores, donde tan solo en las elecciones municipales llegamos a algo pequeñas papelerías

Unipapel hizo un gran patrimonio con una pieza pequeña de papel doblándola y plegándola multiplicaba por 10 ese costo de papel, los últimos años era un proceso en el que no se tocaba nada todo estaba automatizado y robotizado. En mi curiosidad papelera he tenido el privilegio de visitar las dos fábricas de sobres de españa la de UNIPAPEL Trescantos (DEP) y la de Alcala de Henares de Tompla. Disfrute de ver unas fábricas donde los años de pujanza del sobre no se escatimó nada y daba gusto recorrer sus pasillos y oler la tinta de sus impresiones.

Bueno cada vez hay menos fábricas de sobres y menos envíos publicitarios, circula estos días el enlace para que no llegue publicidad electoral a nuestra casa, no es que sea ni mucho menos un gasto en esta campaña ridícula a la que nos vamos a exponer en próximas semanas.

El refrán de que nunca llueve a gusto de todos se puede emplear estos días donde nadie le encuentra un sentido lógico a estas elecciones, a lo mejor los políticos lo hicieron para salvar a las fábricas de sobres.